El mes de octubre, para nosotros de la Familia Guanelliana, está especialmente consagrado a nuestro santo fundador, San Luis Guanella, quien partió a la Casa del Padre el día 24. Es un tiempo de profunda espiritualidad y de fiesta, en el que, junto a los asistidos de nuestras obras y parroquias, celebramos con alegría la vida y el legado de nuestro fundador.

San Luis Guanella, siguiendo el ejemplo de Jesús, que nos enseña: “Lo que hicisteis a uno de estos pequeños, a mí me lo hicisteis”, nos dejó el carisma de la caridad. Este don nos inspira a acoger, servir y caminar con los pequeños y olvidados de la sociedad. Por medio de nuestras obras asistenciales y comunitarias, seguimos extendiendo la tienda de la caridad y del amor providente y misericordioso de Dios Padre.

El día 24, los Guanellianos Cooperadores también renovaron sus promesas. Ellos forman la tercera rama de la Familia Guanelliana, compuesta por laicos que, desde sus realidades, eligen vivir el carisma dejado por San Luis Guanella. En Carazinho, celebramos con alegría las promesas de cinco nuevos miembros que se unen a la familia guanelliana, compuesta por los Padres y Hermanos Siervos de la Caridad, los Cooperadores Guanellianos y las Hermanas Hijas de Santa María de la Providencia.

Agradezcamos al Señor por habernos regalado a San Luis Guanella. Que él continúe inspirando nuestra misión y fortaleciendo la obra guanelliana en todo el mundo.

¡Mira abajo las fotos de estos momentos de fe y comunión!